La Facultad de Ciencias de la Salud de Ceuta organiza por tercer año una iniciativa para que sus estudiantes cuenten con herramientas y sepan actuar ante cualquier violencia ejercida contra ellas.
Ir a una zona conocida o aproximarse a un lugar donde haya personas. Son algunas de las acciones recomendadas cuando el peligro acecha y los sentidos avisa de que algo está por venir. Estas pautas son dadas a conocer este lunes en el Campus de Ceuta donde se celebra la tercera edición de los talleres de defensa personal en colaboración con la UIR de la Policía Local con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.
Protegerse frente a un ataque puede abordarse incluso antes de que se produzca. La cuestión es saber cuáles son los indicios que indican que lo más idóneo es tomar medidas de precaución y, en estas jornadas, se da parte de los mismos.
Si la agresión es inminente, existen una serie de herramientas que pueden ser de ayuda en estos casos de vulnerabilidad. Miguel Ángel Fernández, miembro de la Unidad de Intervención Rápida, explica cuáles son estas bazas en estas circunstancias.
“Les enseñamos cuáles son los recursos naturales y qué hay que hacer para a posteriori poder neutralizar o incapacitar los actos".
Relevancia
La respuesta a estos talleres es bastante positiva. Muchas personas responden y se interesan por esta actividad. El profesor y Coordinador de la Titulación del Grado, Sergio Toribio, señala que es importante que se lleven a cabo esta clase de actos.
“Es muy relevante que cualquier centro educativo oriente a sus estudiantes y les indiquen medidas, detalles e información no solo con testimonios o charlas, también a través del conocimiento de grupos existentes a nivel local como, la policía, o saber cómo actuar ante una situación de este tipo”, incide.
Asimismo, se recomienda continuar con estas prácticas en casas o en asociaciones o centros donde se lleven a cabo. “Aquí se dan pinceladas, pero se puede continuar en el hogar, no hace falta irse a un gimnasio”, añade Fernández.
Así, los talleres se consolidan un año más como una baza para aprender a defenderse ante ataques violentos.